Hace algunos días el senador Carles Mulet preguntó oficialmente sobre los planes que el gobierno de España tiene ante la posibilidad de un apocalipsis zombi. Cansado de que sus preguntas serias no tuviesen contestación, supongo que decidió que, puestos a recibir la callada por respuesta, mejor echarse unas risas.
La respuesta no se hizo esperar. Comienza advirtiendo que, si se entiende por apocalipsis el significado de “fin del mundo” no, no hay protocolos porque pa qué. En cuanto a la otra acepción de “situación catastrófica,” afirma que, por el contrario, hay un sistema global de procedimientos y protocolos para casos de emergencia; lástima que no especificase cuáles son o cómo consultarlos, porque eso hubiera sido información útil.
Por otro lado, el gobierno entiende que zombi es, o bien una persona muerta y reanimada por arte de brujería, en cuyo caso no hay protocolos “dada la dudosa probabilidad de que se produzca semejante circunstancia bajo tales premisas”; o bien es un “atontado, que se comporta como un autómata”, y entonces dicen que el gobierno tiene “diversas líneas de actuación,” aunque duda de que en ese caso se pueda hablar de apocalipsis.
Y ahí queda la cosa, entre chascarrillo y pullas.
Compare el lector con el caso norteamericano. Allí tienen una Oficina de Preparación contra Zombis, o al menos el Centro de Control de Enfermedades (CDC) tiene una web muy completa, con blog, pósters, advertencias y hasta una novela gráfica. ¿Acaso el gobierno de Obama se tomó más en serio la amenaza zombi que el de Rajoy? No lo creo. Lo que sucede es que esa gente tiene más dedos de frente. En pleno auge de los Walking Dead, el CDC se apercibió del filón publicitario y convirtió el rollo zombi en una oportunidad para recordar que “si estás bien equipado para tratar con un apocalipsis zombi, también lo estarás para un huracán, pandemia, terremoto o ataque terrorista,” convirtiendo así a los muertos vivientes en ejemplos vivos para la preparación frente a desastres naturales.
Yo llevo años usando ejemplos de películas y series para enseñar Física en mi Universidad, hacemos seminarios, y a tenor del éxito que he tenido en Naukas Bilbao creo que es una gran idea. Otros compañeros hacen lo mismo, en carreras de ciencias y de letras. El tema zombi ha servido incluso como ejemplo ilustrativos para los modelos de epidemiología, con aplicaciones en enfermedades como el sida o el ébola (ver ejemplos aquí, aquí y aquí).
Creo que, en efecto, el gobierno español tiene razón en que un apocalipsis zombi es un suceso de muy baja probabilidad, pero podían haber aprovechado la oportunidad. Igual de improbable es suponer que el gobierno de EEUU pueda construir una Estrella de la Muerte, y bien que la oficina de Obama convirtió la cuchufleta en una oportunidad para atraer la atención sobre proyectos de investigación civiles. ¿Qué le hubiera costado a nuestro gobierno ponerse un poco las pilas? Como poco, podrían habernos dicho cuáles son los protocolos de actuación en caso de catástrofe.
Eso sí, a la que alguien le pregunte por las meigas, lo mismo nuestro gallego presidente sale por fin a la palestra y nos confirma que haberlas, haylas. O no.
Leyendo el último párrafo de la respuesta del gobierno, lo que pareciere ser no más que un chascarrillo sobre la improbabilidad de un apocalipsis de tales características se convierte en algo bastante sombrío sobre el futuro de la humanidad o, al menos, de nuestro país, dada nuestra recién evidenciada falta de protocolo específico para actuar ante tal amenaza. En dicho párrafo se ocupan de la acepción “atontado” del término zombi, dudando de que “quienes se pudieran encontrar en las circunstancias descritas en la citada definición –por muchos que sean– puedan llegar a protagonizar una situación de apocalipsis” como la descrita.
No parece que hayan leído el ensayo humorístico (¿humorístico?) “Las leyes fundamentales de la estupidez humana” del historiador económico Carlo Maria Cipolla, publicado en el libro “Allegro ma non troppo”. Estas leyes son:
1. Siempre e inevitablemente cualquiera de nosotros subestima el número de individuos estúpidos en circulación.
2. La probabilidad de que una persona dada sea estúpida es independiente de cualquier otra característica propia de dicha persona.
3. Una persona es estúpida si causa daño a otras personas o grupo de personas sin obtener ella ganancia personal alguna, o, incluso peor, provocándose daño a sí misma en el proceso.
4. Las personas no-estúpidas siempre subestiman el potencial dañino de la gente estúpida; constantemente olvidan que, en cualquier momento, en cualquier lugar y en cualquier circunstancia, asociarse con individuos estúpidos constituye invariablemente un error costoso.
5. Una persona estúpida es el tipo de persona más peligrosa que puede existir.
Pues, efectivamente, si nos atenemos a estas leyes, la lectura del mencionado último párrafo de la respuesta del gobierno se torna más sombría y preocupante de lo que una lectura más superficial indicaría. Dado que los atontados son legión (primera ley), que su background no influye en nada en dicho estado (segunda ley), que son lo más peligroso que existe (quinta ley), y todo unido a que, visto lo visto en nuestra arena política durante el último par de años, dicha arena pudiera estar repleta de este tipo de zombi, el corolario es aterrador: no se trata de evaluar la probabilidad de que ocurra este tipo de apocalipsis en un futuro más o menos cercano, el apocalipsis zombi ya está aquí.
Querido profesor, su presindente gallego — mio no es ni de coña, ponga como se ponga —, jamas contestaria a ninguna pregunta, ni sobre meigas, ni sobre la lezo, ni sobre el coño insumiso.
Lo mas lamentable es que tiepos como ese «zombi» mantiennen vijente y justificado el topico gallego y la definicion del RAE que tanto molesta a los nacionalistas — o no — gallegos.
Siempre que ha gobernado un tipo asi este pais, nos han dejado el culo como la bandera del japon, pero eso si, españa una grande y libre… o no.
Ahora saldra el nervioso de turno a ponerme a parir, pero dicho esto con la experiencia de un vallekano que lleva 20 años en galicia, tengo un pelin de experiencia practica en esto.
No se si hay o no hay apocalipsis zombi, pero apocalipsis del gallego de chiste — sin puta gracia — hace años que esta aqui.
¿Hace falta ser nacionalista para que moleste dicha definición?
En Vallecas no había quien te aguantase, no?
«Siéntate a la puerta de tu casa y verás pasar el cadáver de tu enemigo»… (*)
¿Valdría como protocolo?
(*) Proverbio árabe, o … ¿gallego?
Ya vimos con el circo del Ébola lo preparado que está el Gobierno. Si ese no mueve un dedo ante la pobreza galopante de este país o la interminable caterva de corruptos de su partido (y no solo están allí), difícilmente va a actuar ante algo así -los políticos nunca miran más allá de unas elecciones-.