Entre las cosas de que más orgulloso me siento en mi labor profesional, los proyectos de innovación docente ocupan un lugar preferente. Desde 2009, la Universidad de Granada me ha apoyado con un proyecto llamado Física de Película, en el que utilizo fragmentos de cine y televisión para enseñar Física a mis alumnos. Durante varios años he contado con el apoyo de mi Universidad para crear materiales audiovisuales que ya están siendo usados con mucho éxito.
Este año, el proyecto Física de Película no será renovado. Seguiré usando los materiales creados con él, pero ha llegado un punto en el que creo que renovarlo como proyecto docente ya no tiene sentido. En realidad, hace tiempo que dejó de ser un proyecto, ya que se ha convertido en una iniciativa madura y estable. Todo, repito, gracias a mi Universidad, y quiero decirlo bien claro porque en estos tiempos de crisis en que se escatima el dinero para todo es una alegría ver que hay gente con ganas de apoyarte en tus tareas docentes. Gracias, chicos.
Hay un segundo motivo para haber dejado ese proyecto: quiero hacer otras cosas. Desde hace algún tiempo tenía algo en mente, algo que creo ayudará no sólo a mis alumnos sino a muchos otros estudiantes de ciencias. Ahora voy a hacerlo. Porque hoy he recibido la noticia de que la UGR lo ha aprobado, y con nota además (la ANECA me lo ha evaluado con una calificación de 8,75 sobre 10).
Se trata de algo que he constatado en cada vez más lugares: los estudiantes de ciencias no saben cómo usar la Ciencia. No conocen lo que es el método científico, cómo analizar artículos científicos, les da igual uno que un millón y no saben distinguir una ciencia de una seudociencia. No es que sean tontos; sencillamente, nadie se lo ha explicado. En el instituto pasan de largo sobre el tema, y en la Universidad creemos que la formación científica se les pega sola.
Me consta que muchos de mis compañeros Naukers también sienten este mismo problema, y no sé cuántas veces he oído a algunos de ellos perorar sobre la necesidad de crear un curso sobre método científico. Bien, amigos, estoy en ello.
Porque mi nuevo Proyecto de Innovación Docente va de eso. El título lo dice claro:
«Anumerismo, Ciencia, Método y Escepticismo (ACME): un curso MOOC para futuros científicos»
Podéis leer la solicitud completa aquí, pero de todos modos voy a incluiros algunos párrafos para que entendáis mis motivos:
Dentro de las Competencias Generales que los alumnos deben desarrollar en la Facultad de Ciencias de la Universidad de Granada se encuentra la capacidad de razonar críticamente (CG09), uno de los requisitos básicos de todo científico. Unido al “protocolo de actuación” que habitualmente denominamos Método Científico, el pensamiento crítico proporciona una forma de trabajo que distingue la Ciencia de otras ramas del saber como la Filosofía o el Arte.
Y sin embargo, los alumnos que llegan a la Universidad no suelen estar al tanto de lo que significa el método científico, por qué se usa, qué ventajas e inconvenientes tiene, o cómo se aplica en el trabajo diario. La Universidad trata el razonamiento crítico como antiguamente el Ejército consideraba el valor del soldado: se le supone. No hay pruebas ni procedimientos para animar al razonamiento crítico, al escepticismo, a pensar antes de opinar. Los libros de Ciencia Universitaria no suelen hablar del método científico en absoluto, e incluso los autores más innovadores se limitan a despachar el tema con dos o tres párrafos.
Como resultado, tenemos que incluso en las carreras de ciencias el alumno pasa de asignatura en asignatura, de curso en curso, sin apenas alicientes o estímulos que le permitan generar un sano escepticismo. Parece que la ciencia fuese un camino perfectamente bien trazado, y lo que queda por descubrir es poco más que rutina. Y, en caso de duda, Wikipedia. La mente inquieta y rebelde del científico en ciernes se ha convertido en una herramienta inútil, conformista y rutinaria, lo que resulta ciertamente inadecuado para quienes pretenden avanzar las fronteras del conocimiento científico.
Esta actitud hacia la crítica y el escepticismo no se limita a los estudiantes científicos. El conformismo crédulo está tan asumido por parte del público en general que luchar contra él está socialmente mal visto. La sociedad actual valora el hecho de creer en algo (con o sin motivos), mientras relega el escepticismo a la categoría de extremismo radical. Las propias palabras escepticismo y crítica se suelen entender en su connotación más negativa. Los que dudan, los que se apartan de la norma tras llegar a conclusiones propias, los que realizan juicios de valores basados en evidencias y se alejan del pensamiento mayoritario suelen ser vistos como bichos raros de los que hay que apartarse; paradójicamente también son el tipo de personas que forma parte de la élite científica en cualquier época, especialmente la actual…
ACME será, si todo sale bien, un curso online masivo y abierto (MOOC), que espero sirva para todos aquellos interesados en el uso del método científico, los problemas del anumerismo y el ejercicio del sano escepticismo. Tengo buena parte ya hecho en mi cabeza, y ahora tengo el respaldo oficial de la UGR para llevarlo a cabo.
Será tarea difícil. Mientras escribo, hay abierta en la lista de correo de Naukas una viva discusión sobre qué es exactamente el método científico, cómo se aplica (e incluso si existe como tal) y los problemas de la falsabilidad; y no me cabe duda de que mi pequeño ACME va a levantar pasiones, no siempre positivas. Pero la ciencia es debate permanente, y no tengo miedo. Al contrario, creo que me voy a divertir.
No voy a estar solo. Dos buenos espadas se prestaron hace tiempo a colaborar con mi proyecto. Se trata de Clara Grima, una de las mejores divulgadoras de matemáticas de nuestro país, y Luis Alfonso Gámez, conductor de la serie de televisión Escépticos. Una sevillana y un bilbaíno, coordinados por este granadino que escribe. Esto promete.
Ay, profe, en qué líos te metes. Digooo, seguiremos informando.
¡Gran iniciativa!
Suerte y ¡fuerza! Cosas como esta merecen el éxito.
Saludos,
Ricardo
Me parece una propuesta buenísima. Estaremos pendientes.
Gracias.
Mis más sinceras y merecidas felicitaciones!…y si, como comentas: será un curso online masivo y abierto (MOOC)….Pues seré el primer divulgador del mismo y, por supuesto inscrito. Saludos desde Venezuela….Edgar Redondo
Suena estupendo. ¿Habrá «crossover» con física de película para proponer casos de estudio (Lucy, cof, cof)?
Siempre me alucinó esta conversación en el vacío. Salu2
Me alegra que alguien tome la iniciativa, yo soy estudiante de ingeniería en Nanotecnología y si acaso solo han mencionado el método científico pero nunca se ha hablado mas alla. y la verdad me encantaría tomar un curso de este tipo. así que les deseo mucha suerte con este proyecto.
¡Felicidades Doctor Quirantes! ¿Cómo van a ser las inscripciones?
Saludos.
¡Excelente iniciativa! ¿Cómo me inscribo?
Saludos
Por favor podrás informar cuando salga el curso?
Estoy muy interesado
Muchas gracias
Aún queda mucha liga, pero cuando esté listo lo anunciaré a los cuatro vientos, por supuesto.
¡Ay Platon que daño hicistes!
Yo también quiero apuntarme al curso. Avísame cuando empiece, por favor.
Estoy ansioso por empezar!!!! Grande Arturo